DISFRUTA DE LA NIEVE CON SALUD

En un día de nieve hay muchas cosas divertidas que se pueden hacer como salir a sacar fotos, tener una guerra de nieve, hacer muñecos, raqueta, tirarte en trineos, culopatin, esquiar o hacer snowboard.

Lo importante es que no te falten alimentos que aporten toda la energía necesaria para resguardarnos del frío y mantenernos activos a lo largo de todo el día. Muchas veces llevas una mochila con comida, por eso hacer una buena elección de alimentos es fundamental para resistir un día entero en la nieve.


CONSEJOS DE ALIMENTACION, EN UN DIA DE NIEVE

• La primera comida del día es el desayuno, así que es aconsejable que sea calórico y energético ya que nos espera una larga jornada por delante. Un ejemplo de desayuno completo y saludable puede ser yogur natural sin azúcar, con frutas variadas como banana, naranja, manzana… también se puede combinar con cereales integrales como avena. Otro ejemplo sería una tostada de pan integral con queso, acompañado siempre con algo de fruta. Son dos desayunos ricos en proteínas y grasas saludables que tienen el aporte justo para afrontar un día de nieve.

• Es aconsejable llevar en la mochila snacks saludables que nos aporten energía y saciedad, pero no pesadez. Los frutos secos, la fruta, el chocolate negro con un porcentaje igual o superior a 85% de cacao. También podés incluir pasas, o cualquier fruta deshidratada para comer cuando haces un descanso.

• A la hora del almuerzo y la cena siempre es buena elección optar por carbohidratos como un plato de pasta o arroz integral, sin olvidarnos de las verduras y de las proteínas, para recuperar la energía perdida. Otra opción igual de válida sería una buena ración de legumbres, son una óptima fuente de proteínas vegetales, energéticas y muy nutritivas.

• No te olvides del agua. Cuando haces actividad física es muy importante mantener el cuerpo hidratado. Cuando estamos en la nieve, debido al esfuerzo físico y a la altitud, nuestro cuerpo se deshidrata. No olvides tomar sorbos de agua cada cierto tiempo, aunque no tengas sed.

• Lo ideal cuando estamos mucho tiempo en la nieve, es no dejar pasar muchas horas entre comida y comida. Te recomendamos comer algo cada 3 horas aproximadamente para ir recuperando energía de forma progresiva.


MAS CONSEJOS PARA DISFRUTAR AL MAXIMO

Practicar deportes trae numerosos beneficios para la salud, pero también nos expone a sufrir algún tipo de lesión si lo hacemos en forma imprudente, sin la técnica adecuada o sobrexigiendo al cuerpo. En el caso de los deportes de invierno, la mayoría de los traumatismos se producen por caídas, por falta de experiencia o por técnicas deficientes. Te dejamos unos consejos para prevenirlos.

 Lográ una buena preparación física. Para iniciarse en un deporte invernal, es primordial tener una buena condición aeróbica, una musculatura fuerte, articulaciones estables con buena amplitud de movimientos y, sobre todo, una muy buena elongación. Para ello, se aconseja que los entrenamientos se realicen durante todo el año, ya que hacerlo en forma intensiva durante solo un período antes de comenzar la práctica puede provocar lesiones. Si sos principiante, comenzá con un instructor.

Verificá que los equipos estén en buen estado. La calidad y el mantenimiento de los elementos propios o de alquiler deben ser óptimos. Utilizar la indumentaria para nieve evita enfriamientos en los músculos.

Usar protección para evitar lesiones. Usá casco para no sufrir traumatismos de cráneo y de columna cervical, gafas con cristales con protección UVA para sortear lesiones de córnea y cremas con filtro solar para cuidar la piel ante eventuales quemaduras de sol en las manos, la cara y los labios.

Entrá en calor antes de la actividad.  Empezá con ejercicios de flexibilidad articular y aumenta la intensidad del esfuerzo físico en forma progresiva para calentar las articulaciones en las primeras bajadas. Practicá siempre en pendientes y pistas acordes a tu nivel.

Descansá bien durante la noche. Muchas lesiones también pueden producirse por cansancio, pocas horas de sueño, un exceso de actividad física o una hidratación insuficiente.