EN TU TRABAJO, SUMA HABITOS SALUDABLES

¿CUANTO TIEMPO PASAMOS TRABAJANDO?

La jornada laboral es de 8 horas, restándole al día las 8 horas que debemos dormir, podríamos decir que el trabajo se lleva el 50% de nuestro tiempo despierto, muchas horas en las que nuestro cuerpo puede sufrir si no le prestamos la atención suficiente.


¿POR QUE ES TAN IMPORTANTE TENER HABITOS SALUBLES EN EL TRABAJO?

Debido a la cantidad de horas que dedicamos al trabajo, es muy importante mantener una serie de hábitos saludables, relacionados con nuestra actividad y adaptados a nuestras características personales. No hacerlo aumenta en gran medida el riesgo de padecer lesiones, accidentes o enfermedades asociadas. Para disminuir este riesgo es imprescindible que tanto empleadores/as como trabajadores/as se mentalicen de su influencia en el proceso de prevención, y lleven a cabo las medidas necesarias para mejorar su entorno laboral. Esto ayudará a mejorar la calidad de vida de los/as trabajadores/as y su rendimiento, beneficiando a su vez la producción a medio y largo plazo.

Los principales problemas de salud que se relacionan con hábitos inadecuados en el trabajo son, la mala alimentación, sedentarismo, sobrecargas y malas posturas. A continuación, te los explicamos y te dejamos algunos consejos de hábitos saludables fáciles de aplicar.

Mala alimentación: Los horarios, la falta de conciliación con la vida personal o la dificultad en el acceso a una alimentación adecuada, influye en que trabajadores y trabajadoras acaben comiendo de forma inadecuada. Esto se asocia a la obesidad, la malnutrición, enfermedades coronarias, presión arterial o colesterol altos, diabetes, etc. Nuestra recomendación es que te prepares una vianda para llevar al trabajo o que controles lo que comes si lo haces en bares o restaurantes. No olvides de tomar dos litros de agua al día.


Sedentarismo: Los trabajos que requieren poca actividad física aumentan el riesgo de obesidad, y resto de patologías orgánicas anteriormente mencionadas. Para disminuir los efectos de la falta de actividad física, utiliza alarmas cada hora que te avisen de que tenes que levantarte, andar, estirar o moverte, aunque sea unos segundos. Aprovecha los momentos de ose para salir a caminar.

Sobrecarga física: Por el contrario, los trabajos que requieren una alta demanda física pueden producir tensiones excesivas que terminen provocando lesiones como tendinitis, lumbalgia, hernias discales, etc. Mantene tu cuerpo en forma con deportes o actividades regulares que refuercen las zonas de sobrecarga o protejan tu columna.


Sobrecarga mental: El estrés, la alta exigencia, la baja remuneración, la falta de descansos, o incluso el aburrimiento y la desmotivación, son factores desencadenantes de problemas tanto físicos como mentales.

Los efectos más comunes son la bajada de defensas, enfermedades coronarias, aumento de presión arterial, trastornos de la piel, depresión o ansiedad. Estructura bien tu horario de trabajo para dejar tiempos de descanso, prepárate para los periodos de mayor carga laboral, no te lleves el trabajo a casa.


Posturas inadecuadas: Mantener de forma prolongada una posición en la que nuestro cuerpo no esté cómodo, puede provocar descompensaciones en nuestro sistema musculoesquelético. Esto acabará produciendo casi con toda seguridad trastornos como contracturas, pinzamientos, cefaleas, desviaciones, e inflamación de tejidos.

Posturas recomendadas, para trabajos en las que se pasan grandes periodos de tiempo sentado:

• Mantener la espalda recta y apoyada cómodamente en el respaldo de la silla, al menos en la zona lumbar.

• Los pies deben estar bien apoyados en el suelo, o en una cuña que se adapte a tu medida y te permita apoyarlos completamente.

• La mesa debe quedar a la altura de los codos, formando un ángulo de 90º y que no apoye en su canto contra los antebrazos.

• La computadora y el teclado deben de estar colocados de frente, de forma que no haya que girar el cuello o el tronco. A una altura que no te obligue a inclinar la cabeza por encima o por debajo de la horizontal.


Estas son solo unas cuantas maneras de llevar una vida laboral lo más saludable posible, lo más importante es encontrar pequeñas formas de mantener la motivación y la salud, tanto a nivel físico como psicológico. Combina trabajo y salud con cada oportunidad que tengas, cuida tu postura, reite y recorda cuáles son las cosas que realmente te motivan del trabajo. Aprende a disfrutar de tu espacio de trabajo y a cuidarte mientras lo haces. ¿Empezamos?